top of page

¿Qué es la osteporosis?

La osteoporosis (OP) es una enfermedad metabólica ósea caracterizada por una disminución de la resistencia del hueso que conlleva un mayor riesgo de fracturas. Esta enfermedad afecta principalmente al sexo femenino en relación 2/1 y con crecimiento exponencial con la edad.

Las fracturas son la expresión clínica de la enfermedad. Es decir, que la osteoporosis no duele, ni produce ningún otro síntoma, nada más que el de la fractura cuando la enfermedad se encuentra establecida. De ahí la importancia de la actuación en prevención primaria, es decir, poner los medios pertinentes y necesarios para prevenir que aparezca la enfermedad.


Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) la prevalencia se estima en un 30% de las mujeres caucásicas y en un 8% de los varones mayores de 50 años y estas cifras se elevan a valores del 50% en mujeres mayores de 70 años.


La OMS en 1993, y por su comisión de expertos, la definió como “una enfermedad sistémica caracterizada por una disminución de la masa ósea y un deterioro de la microarquitectura del tejido óseo que comporta un incremento de la fragilidad del mismo con el consecuente aumento del riesgo de fracturas”. Se incluyeron criterios densitométricos en función de la densidad de masa ósea perdida respecto de los valores medidos en una población homogénea (mismo sexo, misma raza y edad comprendida entre 20-40 años), denominando a este parámetro “T”, surgiendo cuatro grupos en virtud de dicho parámetro:


  1. NORMAL: con densidad de masa ósea mayor a 1 desviación estándar (DE) del parámetro T.

  2. OSTEOPENIA: si la densidad de masa ósea estaba comprendida entre los valores -1 y –2,5 del parámetro T.

  3. OSTEOPOROSIS: si la densidad de masa ósea era inferior a –2,5 DE de la T-score.

  4. OSTEOPOROSIS GRAVE: cuando la densidad de masa ósea era inferior a –2,5 y existía fractura. En la actualidad también se le denomina OP establecida.


El hueso es un tejido vivo que se renueva constantemente gracias a un fenómeno denominado “remodelado óseo”.

Tanto en hombres como en mujeres, la masa ósea comienza a disminuir a partir de la década de los 40, pero además las mujeres sufren una pérdida acelerada de masa ósea en los 5-10 años siguiente a la menopausia.

Como hemos explicado anteriormente, la OP es un proceso silente, sin síntomas, hasta que se produce la primera fractura. Por tanto, la clínica de la OP dependerá de las fracturas asociadas a la misma, así como de la presencia de los factores clínicos de riesgo que hagan sospechar riesgo de padecerla.