Uno de los principales desencadenantes del estreñimiento ocasional es una dieta desequilibrada y pobre en determinadas sustancias. Si bien es cierto que no es el único motivo por el que se puede generar este trastorno digestivo, es un factor muy importante que podemos aprender a controlar si sabemos qué alimentación es recomendable llevar en estos casos:
Las frutas han de formar parte de nuestra alimentación diaria. Es mejor consumirlas con cáscara siempre que se pueda, pues es en esta parte del alimento donde más cantidad de fibra hay, una sustancia vital para evitar el estreñimiento.
Las verduras son también ricas en fibra por lo que es interesante incorporarlas en nuestra dieta habitualmente. Las verduras de hoja verde son las que contienen más de esta sustancia.
Las legumbres son buenas para equilibrar el funcionamiento del intestino, pero es importante que estén bien cocidas para impedir que se produzcan gases e hinchazón en el abdomen.
Los frutos secos en las cantidades recomendadas resultan una opción muy saludable para cuidar nuestro estómago: nueces, cacahuetes o almendras, son algunos de los más aconsejados en el caso de estar estreñidos.
Los lácteos pueden ser también aliados en el caso de que estemos estreñidos. Sin embargo, en estas situaciones es mejor consumirlos fríos, yogures principalmente, y en el caso de los quesos que sean suaves y a ser posible untables.
Incorporando cada uno de estos alimentos de una forma adecuada y paulatina en nuestra dieta habitual empezaremos a notar que mejora la frecuencia con la que vamos al baño. Pero además, podemos adoptar otras medidas. Por ejemplo, es importante no reprimir las ganas de hacer deposiciones, porque esto puede ser contraproducente y favorecer el estreñimiento.
Los cambios en nuestra vida bien por un viaje bien por motivos personales, pueden afectar a nuestro aparato digestivo, de modo que antes de hacer una dieta específica lo más recomendable es que acudamos a nuestro médico.
La homeopatía ofrece tratamientos para abordar el estreñimiento ocasional. El médico homeópata va a tener en cuenta no sólo la alimentación del afectado, sino que también analizará las circunstancias no sólo relativas a la enfermedad que rodean a la persona, sino también todo lo relacionado con aspectos físicos y emocionales.
De este modo, el tratamiento homeopático se adecúa a cada persona y resulta de utilidad en el abordaje del estreñimiento y otros trastornos que pueden estar vinculados como el estrés o incluso la aparición de hemorroides.